Decir SÍ a la infancia: una apuesta por la educación preescolar en Santa Isabel, Remedios
- Daniel Henao
- 15 jul
- 2 Min. de lectura
En Fundación Quintana creemos que cada niña y niño merece un comienzo lleno de oportunidades. Por eso, ante el creciente número de solicitudes para acceder al nivel de educación preescolar en nuestro programa, decidimos dar un paso firme: crear una nueva línea de atención dentro del Centro de Aprendizaje del Nordeste, ubicado en el corregimiento Santa Isabel, Remedios.
Esta iniciativa nace como una prueba piloto educativa que responde a una necesidad sentida de la comunidad. No se trata solo de abrir más cupos, sino de hacerlo con sentido, con propósito, con una profunda convicción de que invertir en la primera infancia rural es sembrar futuro para todo el territorio.
Un entorno donde el juego y la curiosidad son parte del aprendizaje
Desde el corazón del Nordeste antioqueño, promovemos un modelo pedagógico que potencia el desarrollo cognitivo infantil mediante experiencias significativas de juego, interacción y exploración. En este nuevo espacio, cada día está diseñado para despertar la curiosidad infantil, fortalecer vínculos afectivos y estimular el pensamiento crítico desde edades tempranas.
El juego no es un complemento: es la herramienta más poderosa que tenemos para acompañar el crecimiento de los más pequeños. Por eso, nuestras aulas se transforman en escenarios vivos donde aprender es una aventura y cada momento se convierte en una oportunidad para descubrir, crear y compartir.
Educación con sentido, desde lo rural
La apertura de esta nueva línea en el Centro de Aprendizaje del Nordeste representa una acción concreta en nuestra apuesta por una educación con sentido, centrada en la equidad y en las particularidades de los territorios. Entendemos que garantizar el acceso a la educación preescolar en contextos rurales es también una forma de cerrar brechas y dignificar las infancias que históricamente han sido invisibilizadas.
En Fundación Quintana no trabajamos desde el asistencialismo, sino desde el compromiso. Creemos en la equidad en la educación como principio transformador, y en el poder de las comunidades para liderar sus propios procesos de desarrollo.
Seguimos creciendo juntos
Esta prueba piloto educativa no es un punto de llegada, sino un punto de partida. Cada niño y niña que ingresa a este programa representa una historia nueva por escribir, un sueño que se enciende y una comunidad que se fortalece.
Seguiremos caminando al lado de las familias, los docentes y los líderes del territorio, convencidos de que juntos podemos construir una educación donde el campo también florezca. Porque cuando decimos sí a la infancia, decimos sí al futuro.







Comentarios